El verse y sentirse bien
En la actualidad, existe una obsesión por controlar el peso, por ejemplo cuando caemos en la tentación de comer un plato de comida con alto contenido de carbohidratos o un postre con alto nivel de calorías trae como consecuencia que subamos unos kilitos adicionales y vayamos corriendo al gimnasio a quemar esas calorías con una rutina de ejercicios que nos deja agotados y otra vez volvemos a engreirnos con otra tentación gastronómica, cayendo en un péndulo contínuo de subir y bajar de peso. Lo recomendable es seguir los consejos del nutricionista donde no nos sintamos ni gordos ni flacos sino que ofrezcamos el cuidado de nuestro cuerpo a Dios sin caer en extremos, para vernos y sentirnos bien ante su presencia, ya que para Él nuestro cuerpo es tan importante que lo hará resucitar en el juicio final para bien o mal nuestro según las obras que hayamos hecho en nuestra vida terrenal.
Comentarios
Publicar un comentario